El sector del comercio y la logística internacionales cuentan con diferentes herramientas que les permiten optimizar los recursos que emplean y mejorar sus márgenes comerciales. Estas herramientas se basan en una gestión cada vez más eficiente del tránsito de las mercancías hasta completar la cadena logística.

En el caso de las operaciones de importación, la Unión Europea ofrece a las empresas un tipo de régimen especial que permite que las mercancías dispongan de una exención temporal del pago de impuestos y aranceles hasta que se les otorgue un destino aduanero. Se trata del despacho de depósito temporal.

Sin embargo, los envíos que se encuentran bajo esta modalidad de despacho no pueden ser alojados en cualquier tipo de depósito, sino que deben ser custodiados exclusivamente en unos almacenes especialmente reconocidos por la Autoridad Aduanera. Son los llamados Almacenes de Depósito Temporal y cuentan con unas funciones y características determinadas.

La Agencia Tributaria –máxima responsable de las actividades aduaneras en nuestro país– define un ADT o Almacén de Depósito Temporal como: “un lugar autorizado por las autoridades aduaneras para almacenar las mercancías de depósito temporal”.

Consiste en un recinto, autorizado y reconocido por la autoridad aduanera competente, para el almacenamiento de mercancías de importación, que hayan sido presentadas en aduanas y se encuentren a la espera de recibir un destino aduanero.

Se trata de mercancías procedentes de países no miembros de la UE, que se han recepcionado en el país de destino, pero que aún no han sido despachadas al no contar con un destino aduanero final. Estas mercancías quedan al amparo de lo que se llama una “declaración de depósito temporal”.

Y, según establece el Código Aduanero de la Unión, las mercancías en depósito temporal únicamente podrán permanecer en lugares autorizados por las autoridades aduaneras y en las condiciones fijadas por éstas. Estos lugares son los llamados Almacenes de Depósito Temporal.

A nivel de aduanas, los ADT se utilizan para el almacenamiento de mercancías en un régimen de depósito temporal. Sin embargo, en relación con el comercio internacional y los movimientos de mercancías, estos almacenes tienen una utilidad muy interesante.

Teniendo en cuenta que en los ADT se almacenan mercancías en régimen de depósito temporal, al tratarse de bienes que aún no han recibido un destino aduanero final, estos artículos no han sido despachados en aduana y, por lo tanto, no han liquidado los correspondientes impuestos ni aranceles.

De este modo, la existencia de los ADT favorece el comercio internacional y el flujo de las mercancías, ya que permite a las empresas recepcionar y almacenar los bienes en un lugar seguro sin liquidar los despachos aduaneros. Esto contribuye a potenciar las operaciones internacionales, ya que proporcionan una mayor flexibilidad a la cadena de suministro, optimizan los costes operativos y agilizan los procesos aduaneros.

Entre las principales características de los Almacenes de Depósito Temporal podemos destacar las siguientes:

• Tipos de almacén según su titularidad: Existen dos tipos de almacenes que pueden ser de titularidad pública o de titularidad privada. Los privados deben ser expresamente autorizados por las autoridades aduaneras. Para los públicos, que son operados por la propia autoridad, no es necesaria esta autorización.

• Tipos de mercancías que se pueden almacenar: Los ADT únicamente permiten almacenar mercancías de importación de países no pertenecientes al territorio aduanero de la Unión. Permite su almacenamiento desde su llegada al país de destino y su presentación en aduanas, hasta que se les otorgue un destino aduanero.

• Tiempos de permanencia de las mercancías: Según el artículo 149 del CAU, las mercancías que cuenten con el estatuto de depósito temporal podrán permanecer al amparo de esta condición un máximo de 90 días. Transcurrido ese plazo, se deberán incluir en algún régimen aduanero, proceder a su destrucción o ser reexportadas al país de origen.

• Operaciones autorizadas en su interior: Dentro de estos almacenes no se permite ningún tipo de operaciones de manipulación que puedan modificar las mercancías para garantizar que éstas se mantengan inalteradas, sin modificar su presentación o sus características técnicas. Sólo están permitidas aquellas acciones que sean necesarias para asegurar la conservación de las mismas.

• Pago de impuestos y aranceles: Al contener mercancías al amparo de la declaración de depósito temporal, los artículos en su interior no tienen la obligación de liquidar impuestos ni aranceles hasta que se decida su destino aduanero final, momento en que sí realizarán el despacho de aduanas pertinente que corresponda.

• Quién puede ser titular de un ADT: La titularidad la puede ostentar cualquier persona física o jurídica establecida en el territorio aduanero de la Unión que cumpla con una serie de requisitos:

– Disponer de unas instalaciones adecuadas a una distancia de menos de 25Km de la Aduana de Control.

– Ofrecer garantías fiscales suficientes.

– No haber sido sancionado en los 3 últimos años.

– Realizar un volumen mínimo de operaciones al año que justifiquen su concesión.

– Contar con un sistema de contabilidad de existencias de la mercancía depositada en el almacén que garantice el control por parte de la Aduana.

– Disponer de sistemas de transmisión electrónica de datos con la Aduana de Control.

• Obligaciones del titular: Los titulares privados deben cumplir con 2 obligaciones:

– Garantizar que las mercancías que se encuentren en depósito no se sustraigan de la vigilancia aduanera.

– Cumplir con las obligaciones derivadas del almacenamiento de las mercancías en depósito temporal.

Las características de los ADT proporcionan ventajas significativas para la cadena de suministro. Debido a sus particularidades, los ADT favorecen las operaciones de compraventa de bienes entre la UE con terceros países, agilizan el flujo de las mercancías y refuerzan la seguridad en el comercio internacional.

Estas ventajas se deben a que su uso en la logística ofrece ventajas reales para las empresas del sector.

• Permite importar un gran número de mercancías reduciendo los costes de transporte, ya que se pueden recepcionar cargas completas que podrán almacenarse durante 90 días bajo el despacho de depósito temporal.

• Las mercancías pueden ser almacenadas en bloque, pero despachadas de forma individual, lo que facilita las operaciones comerciales de los bienes importados sin incurrir en costes previos.

• Al no tener que liquidar aranceles ni impuestos de las mercancías en depósito, se evita el tener que hacer frente a los costes aduaneros hasta que los bienes no han sido gestionados de forma comercial y se decida su destino aduanero final.

• Como se trata de almacenes que están sometidos al control de las autoridades aduaneras, se favorece la seguridad de las operaciones de comercio internacional; pero, además, se garantiza también la seguridad de las mercancías depositadas en su interior.

Para aprovechar al máximo los beneficios que ofrecen las diferentes figuras aduaneras es importante contar con empresas especializadas que además dispongan de los máximos reconocimientos por parte de las autoridades aduaneras. Esto facilita enormemente el éxito en las operaciones de importación y exportación ya que estos operadores cuentan con la confianza y el respaldo de dichas autoridades.

Como expertos en aduanas, en ADYCO estamos acreditados como Operador Económico Autorizado (OEA) lo que nos convierte en operadores de confianza para las Aduanas en España. Según el artículo 148 del CAU, los OEA cuentan con el máximo respaldo de la autoridad aduanera en la gestión y explotación de los ADT.

De acuerdo con el citado artículo, un operador OEA proporciona la seguridad necesaria en lo que respecta a la buena ejecución de las operaciones. Además, estos operadores garantizan el correcto registro de las mercancías que permitirán a las autoridades aduaneras supervisar la explotación del ADT, especialmente en lo relativo a la identificación de las mercancías, su estatuto aduanero y sus traslados. Por último, el artículo del CAU facilita a los OEA el traslado de mercancías entre diferentes almacenes de depósito temporal al amparo de su reconocimiento como operador fiable y seguro.

Además de contar con estos beneficios relacionados con la gestión de los ADT, en ADYCO ofrecemos a nuestros clientes servicios especializados de asesoría y todas las herramientas y recursos necesarios para optimizar sus operaciones internacionales. Además de disponer de tres ADT ubicados en Madrid, Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria, contamos con todas las figuras aduaneras (DA, DDA y LAME) que permiten optimizar los períodos de almacenamiento de las mercancías para mejorar la rentabilidad de las operaciones.

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